Plenario Nacional de APA 14 y 28 de marzo de 2023

PELIGRAN NUESTROS PUESTOS DE TRABAJO Y EL FUTURO DEL TRANSPORTE AÉREO ARGENTINO

INFORME#049
Asociación del Personal Aeronáutico | Personería Jurídica N° 53

Como parte de la clase trabajadora y el pueblo argentino, tenemos memoria y sabemos lo mucho que se juega en las próximas elecciones nacionales que decidirán

qué gobierno tendremos a partir del 10 de diciembre de 2023.

Esta vez no dejan ningún lugar a duda quienes detentan el poder real en la Argentina: los grupos económicos transnacionalizados; los sectores agropecuarios más reaccionarios agrupados en la Mesa de Enlace; los grupos concentrados de medios de comunicación; los sectores judiciales que actúan como defensores de los intereses de los poderosos; la derecha y ultraderecha política y, como siempre en la historia argentina, las embajadas de Estados Unidos y otras potencias europeas.

Lo anuncian abiertamente como parte de su campaña electoral: van a terminar con el “gradualismo” y van a ejecutar aceleradamente su programa antinacional y antipopular; van a desmantelar todo lo que sea estatal y patrimonio público que se oponga a sus intereses; van a terminar con los derechos y conquistas laborales a través del desmantelamiento de toda la legislación laboral y de la destrucción o debilitamiento de los sindicatos; van a liquidar todas las políticas de protección de la producción nacional y el consumo interno; van a reimplantar plenamente la persecución y proscripción de las y los dirigentes opositores con más arraigo popular -ahora Cristina Fernández de Kirchner como antes lo fue Juan Domingo Perón-; van a hacer retroceder décadas los avances logrados con lucha por todos los organismos de Derechos Humanos; van a suprimir el Ministerio de la Mujer y hacer retroceder los avances en materia de derechos de género; van a subordinar totalmente nuestra política exterior a la estrategia geopolítica de dominación mundial de los Estados Unidos y sus aliados.

La lista es muy larga y va siempre en línea con el modelo de país que, a lo largo de nuestra historia, estos sectores, estas potencias mundiales y esta dirigencia (con otros nombres y muchas veces con los mismos apellidos) han tratado de imponer a nuestra sociedad mediante guerras civiles; persecución política y exilio de nuestros próceres y líderes históricos; “campañas del desierto” contra los pueblos originarios y el pueblo criollo; persecución política a los mismos inmigrantes que se atraía por su trabajo (Ley de Residencia; Semana Trágica; Patagonia Rebelde); golpes de estados cívico-militares (1930, 1955, 1962, 1966, 1976); “fraudes patrióticos” (Década Infame); y ahora golpes y persecuciones judiciales-mediáticos contra dirigentes políticos, sindicales y sociales. Siempre acompañadas de una violenta campaña de odio, acusaciones falsas y maniobras judiciales e institucionales, para influir y meter miedo a la sociedad y el “sentido común”.

Y siempre, como objetivo de sus campañas de sometimiento, exterminio o domesticación, los sectores en lucha por una sociedad mejor y un país democrático, próspero, igualitario y soberano.

Como sindicato, somos autónomos pero no neutrales ni indiferentes.

Siguiendo una línea con Plenarios Nacionales anteriores, realizados ante la inminencia de elecciones nacionales, en ellos se convocaba, como trabajadores y trabajadoras aeronáuticos, como representantes sindicales y como parte del pueblo argentino a fijar una clara posición ante las mismas y apelar al voto de las y los trabajadores representados por APA y sus familias, en defensa de sus propios puestos de trabajo y condiciones salariales y laborales, y de la actividad aeronáutica en su conjunto.

Todo ello sin renunciar a la plena independencia del sindicato respecto a los gobiernos, los partidos políticos y los grupos económicos, que forma parte esencial de la defensa de los derechos e intereses de las y los trabajadores que representa, y de los principios democráticos y pluralistas de nuestra organización gremial.

En la actual coyuntura política, queda claro que, entre las varias propuestas electorales, la disputa principal se da entre los proyectos de país que representan las fuerzas que dieron origen al Frente de Todos y a la alianza Juntos por el Cambio. Cualquiera sea la composición de las boletas que finalmente compitan, esto no cambia las diferencias profundas entre un proyecto y otro. Y nos obliga a pronunciarnos en defensa de un proyecto que dé prioridad a la distribución justa de la riqueza; la producción nacional y el consumo popular; la plena vigencia de la democracia y todos los derechos humanos; y el pleno ejercicio de la soberanía nacional en todos los planos.

Siempre nos opusimos y nos opondremos a lo que representa Juntos por el Cambio en sus distintas variantes macrista, radical o de la mesiánica golpista Carrió, y de los actuales intentos de lavado de cara con dirigentes que fracasaron en la gestión de gobierno o que no ocupan ningún cargo pero se dedican a tiempo completo a desestabilizar el gobierno y sembrar odio y conflictos. Sabemos que todos ellos (Macri, Bullrich, Vidal, Rodríguez Larreta, Morales, Manes, etc.) constituyen una amenaza para nuestros derechos laborales y ciudadanos.

Todos ellos se han pronunciado por una política aérea que siempre ha buscado convertir al servicio público del transporte aéreo en un negocio privado de ellos y sus grupos amigos, a costa del patrimonio nacional y del trabajo aeronáutico argentino digno y calificado.

Como trabajadores y trabajadoras aeronáuticos, sabemos que peligran nuestros puestos de trabajo, nuestros derechos e intereses laborales y la política aérea al servicio del país y de sus habitantes.

Todavía es muy reciente y está muy fresco en nuestra memoria el recuerdo del fracaso del experimento neoliberal en la aviación, a través de la llamada “revolución de los aviones” y la “democratización de los vuelos” del ex presidente Macri y su inefable ministro de transporte Dietrich.

Robando términos al campo popular como “revolución” o “democratización”, el gobierno macrista intentó confundir a la población, tergiversando u ocultando sus verdaderos propósitos y programas, o bien desviando la atención hacia temas secundarios o menores, obligando a APA y los sindicatos aeronáuticos hermanos a hacer un ejercicio de memoria histórica y compartirla con los jóvenes que por una cuestión generacional no la habían vivido, sobre lo que había sido el período dramático de los años 80 y 90 de la desregulación aérea, las privatizaciones, los despidos y la precarización laboral, en los que el futuro de todas las empresas y organismos -y nuestra propia condición de trabajadores aeronáuticos- eran permanente motivo de angustia.

Para favorecer a los grupos económicos low cost a los que estaban asociados Macri, Dietrich, Lopetegui y muchos otros miembros de su gobierno, algunos transnacionales y otros simplemente aventureros, el programa neoliberal

lanzó una ofensiva completa contra la política aérea nacional: “colonizó” con sus adictos a la ANAC y otros organismos y empresas aeronáuticas para que fueran funcionales a sus políticas; desfinanció año tras año el presupuesto de las empresas estatales Aerolíneas Argentinas, Intercargo y Fadea; llenó a estas empresas de directivos (CEOs) de la competidora transnacional Latam y otras empresas privadas para vaciarlas por dentro; organizó audiencias públicas “truchas” otorgando centenares de rutas a empresas desconocidas o que no garantizaban solvencia ni trayectoria; paseó por todo el país a ministros con directivos de algunas de estas empresas haciendo de promotores de las mismas en detrimento de las nacionales; promovió la desaparición de empresas privadas como Sol -que intentaban sobrevivir mediante acuerdos con Aerolíneas Argentinas-; suprimió las bases tarifarias para facilitar el dumping contra la aerolínea de bandera y también otras competidoras privadas; inventó un aeropuerto low cost (El Palomar) al servicio de FlyBondi y Jetsmart que competía con el Sistema Nacional de Aeropuertos y era repudiado por la propia población de la zona; desreguló todos los servicios de rampa para desmantelar a Intercargo; “vendió” la empresa de aviación familiar del presidente (Macair) a un grupo transnacional (Avian) pero manteniendo a sus directivos en la nueva empresa; por sólo mencionar algunas de sus medidas.

Desde APA y los Sindicatos Aeronáuticos Unidos nos opusimos firmemente a esta política, vinculamos nuestra lucha a la del conjunto del campo popular y propusimos en un Plenario Nacional el apoyo a la fórmula presidencial del Frente de Todos.

Una vez más, desde nuestra perspectiva, apoyamos el proyecto de consolidar a la aviación como un factor estratégico, integrador y multiplicador de actividades (transporte de personas y carga, turismo, industria y tecnología aeronáutica y aeroespacial, etc.) al servicio del interés y la soberanía nacional.

Nos preparamos para una nueva etapa de luchas

Una vez más, como tantas veces en la larga historia de luchas de APA, queda claro en esta coyuntura que nuestro sindicato debe estar preparado para intervenir políticamente en defensa de sus conquistas y derechos, y prepararse activamente en materia de organización gremial, capacitación de sus cuadros sindicales y concientización de sus afiliados/as, para una nueva y muy difícil etapa de ataque a la clase trabajadora como la que propone la alianza derechista Juntos por el Cambio.

Para organizarnos en esta nueva etapa nos comprometemos a:

  • Participar y militar activamente desde nuestro lugar en la vida nacional y en la lucha común por un proyecto nacional y popular, al servicio de las grandes mayorías y de la felicidad y derecho a una vida digna del pueblo argentino.
  • Trabajar activamente en el ámbito gremial para que cada delegado/a, dirigente, militante y activista de APA sea un promotor de la lucha por ese proyecto.
  • Fortalecer la estructura federal de APA para que en cada base se pueda desarrollar al máximo la articulación con las fuerzas políticas, sindicales, sociales locales, así como la máxima difusión en la prensa local de nuestras actividades.
  • Desarrollar una política comunicacional para que la totalidad de las y los afiliados de APA y sus familias, así como de las organizaciones hermanas, estén debidamente informadas, capacitadas y preparadas para la acción gremial concreta.
  • Desarrollar todas las formas de participación y militancia de las y los compañeros de APA, profundizando el trabajo de iniciativas que han tenido gran impacto como el Movimiento Social Aeronáutico y el Frente Cultural, y articulándolas con las experiencias de otras organizaciones hermanas.
  • Promover iniciativas participativas y democráticas en todos los frentes (género, derechos humanos, juventud, salud y seguridad laboral, sostenibilidad del transporte aéreo, formación profesional aeronáutica) y formar más y más compañeros y compañeras como cuadros sindicales al servicio de la causa de APA y los sindicatos aeronáuticos unidos.
  • Trabajar sin descanso por la unidad de la clase trabajadora aeronáutica, a nivel nacional e internacional, privilegiando la construcción estratégica de un sindicalismo poderoso frente a otros factores de poder por sobre las particularidades y diferencias coyunturales.

Descargar original

Plenario del Interior

14 a 16 de Marzo

Plenario de Buenos Aires

29 de Marzo

Anchorena 1250 CP C1425ELD